El cassoulet de Carcassonne

Descubra el cassoulet de Carcasona, un plato legendario de la región del Languedoc, profundamente ligado al patrimonio culinario y al espíritu medieval de la ciudad.
Cassoulet tradicional servido en Carcasona

Un cassoulet tradicional servido en un restaurante rústico de la ciudad medieval de Carcasona.

Los orígenes de una leyenda culinaria

Más que un simple plato, el cassoulet es una historia de resiliencia, sabor y orgullo regional. Originario de la región del Languedoc, sus orígenes míticos se remontan al asedio de Castelnaudary durante la Guerra de los Cien Años , cuando los aldeanos reunieron todos los ingredientes disponibles para alimentar a los defensores. Con el paso de los siglos, esta comida rústica de supervivencia se transformó en un símbolo preciado de la gastronomía occitana.

Cassoulet de Carcasona: una variación distintiva

Carcassonne se enorgullece de su propia versión de este plato. Mientras que la versión de Castelnaudary suele llevar confit de pato y Toulouse prefiere las salchichas, el cassoulet de Carcassonne lleva perdiz roja y cordero , ofreciendo un sabor más intenso y con más sabor a caza. Cada ingrediente se cocina a fuego lento para absorber los sabores, y el resultado es una comida abundante, reconfortante e inolvidable.

El ingrediente estrella: el frijol

La clave de cualquier cassoulet son las judías blancas. Ya sean las judías lingot de Castelnaudary o las judías coco de Pamiers , estas legumbres forman la base cremosa y deliciosa del plato. Cultivadas en la región del Lauragais , recibieron la etiqueta IGP (Indicación Geográfica Protegida) en 2020, lo que garantiza su calidad y origen.

La Cassole: Cocinando con Tradición

El cassoulet recibe su nombre de la cassole , una olla de barro tradicional elaborada en el pueblo de Issel, cerca de Castelnaudary. Su singular forma cónica garantiza una distribución uniforme del calor, una cocción lenta y una corteza crujiente, imprescindible para un cassoulet perfecto.

El maridaje perfecto: vino y ambiente

Ninguna experiencia de cassoulet está completa sin una copa de vino tinto intenso de Minervois o Corbières . Estos vinos robustos complementan la riqueza del plato. Como dijo el humorista francés Pierre Desproges: « Un cassoulet sin vino es como un sacerdote sin latín ».

Pruébalo donde nació

Los restaurantes en el corazón de la Cité medieval de Carcassonne ofrecen auténticas experiencias de cassoulet. Servido en cazuelas tradicionales, es más que una comida: es un viaje cultural que te conecta con siglos de historia, sabor y orgullo occitano.

¿Está planeando su visita para disfrutar del Cassoulet?

¿Por qué no combinar tu exploración culinaria con una visita al Castillo y las Murallas de Carcasona? Descubre este lugar declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO y después date el gusto de disfrutar de un humeante cassoulet en los encantadores restaurantes de la Cité.

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